Los Reggae Boyz vuelven a dominar el Caribe

No había sido un año demasiado feliz para el fútbol jamaiquino. Los malos rendimientos en la clasificación para el mundial se cargaron al histórico Renê Simões, aquel hombre que puso a este país ante los ojos de todos en Francia 98. Luego llegaron tres victorias al hilo, bajo la conducción de emergencia del ídolo Theodore Whitmore, que no fueron suficientes para alcanzar el milagro.

Con esos antecedentes inmediatos empezaba la era de John Barnes como entrenador del equipo. La Caribbean Cup era la primera prueba para el ex volante, quien brilló en el Liverpool durante una década y disputó 79 partidos con la selección inglesa, pese a haber nacido en la cálida Kingston. Superando el peso de ser anfitriones y candidatos, los Reggae Boyz reconquistaron el título, ganándole en la final a la sensación del torneo: Grenada. El simpático conjunto de Guadalupe se llevó el último lugar del podio, y junto con Cuba, cuarto, se ganó el derecho a participar de la próxima Copa de Oro de la CONCACAF.

Sólidos y contundentes
A lo largo de los cinco partidos de esta fase final, los Reggae Boyz apenas recibieron dos goles, ambos en la fase de grupos, donde vencieron sin muchos inconvenientes a Grenada y Barbados para luego empatar ante el otro gran equipo de la zona, Trinidad y Tobago. En las semifinales debieron verse las caras con Guadalupe, al que dejaron en el camino con un 2-0, mismo resultado que obtuvieron en la final, instancia en la que volvieron a enfrentarse a Grenada.

La gran sorpresa
Nadie esperaba semejante actuación de Grenada. Todos los pronósticos indicaban que se limitaría a pelear por el tercer lugar del grupo con el flojo equipo de Barbados. Nada más lejos de la realidad. Los Spice Boyz dieron su primer golpe en el debut, ganándole sobre la hora a Trinidad y Tobago. Así lograron tres unidades vitales para su clasificación, que fue sellada con un claro 4-2 sobre el ya mencionado Barbados, único de los ocho finalistas que se retiró sin sumar.

Para alcanzar la final, este ignoto país debió superar a Cuba en los penales, luego de un empate a dos que también llegó a poco del final. Pese a que el título no pudo ser, la histórica clasificación a la Copa de Oro es un premio enorme para un grupo de jugadores que actúa casi exclusivamente en la marginal liga local.

Decepciones
El de Trinidad y Tobago es el segundo trago amargo consecutivo. Hace apenas un año, los Soca Warriors perdían la final en casa. En esta ocasión ni siquiera superaron la primera ronda, por lo que se quedaron afuera de la Copa de Oro y el rótulo de “fracaso” no tardó demasiado en aparecer.
Justamente el que venció a los mundialistas hace un año fue Haití, equipo que se transformó en la segunda gran decepción del certamen. El rendimiento del campeón defensor fue netamente por debajo de las expectativas. Si bien en su último partido derrotó a Cuba, líder del grupo, el empate ante Antigua y Barbuda en el debut y la derrota por 2-3 ante Guadalupe —gol de nuestro amigo el trotamundos Antoine-Curier incluido— terminaron condicionando sus chances.

Balance
En primer lugar, es inevitable no destacar la enorme actuación de Grenada. En la edición anterior ni siquiera había superado la primera ronda, quedando fuera de combate contra los equipos de Guyana, Surinam y Antillas Holandesas. Ahora fue finalista y se ganó el derecho de participar de un torneo con mayor jerarquía, donde tendrá más de un fanático ocasional.

Otro que hizo su debut en rondas finales fue Antigua y Barbuda. Logró dos puntos en tres partidos y puede irse conforme con su actuación, que incluyó empates ante el campeón defensor y Guadalupe, más los tres goles de Peter Byers, delantero del Montreal Impact.

Así se cerró el año en el Caribe, con ritmo de Reggae y varios condimentos interesantes para seguir a estos cuatro equipos en la próxima Copa de Oro.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

como gran aficionado que soy del early reggae, el ska y el rocksteady, no puedo menos que alegrarme por una conquista jamaicana. no sabía que el entrenador ahora era john barnes! buenísimo. igual, seamos sinceros, no ganar esa copa contra esos rivales es prácticamente insultante!

cityground dijo...

Jamaica se merecía el titulo después de quedarse fuera en el grupo mas fuerte de clasificación para el Hexagonal, creo que en cualquier otro se hubiera clasificado.

Gran torneo de Granada y Guadalupe, y Trinidad baja muchísimo sino juegan sus jugadores que militan en equipos ingleses.

Garrincha dijo...

Me alegro que Guadalupe se mantenga entre las punteras de su zona tras la buena Copa de Oro que hizo en su anterior edición. ¿Sigue Angloma por ahí?

Por otro lado, que cambio han pegado los jamaicanos tras la marcha de Renê Simões, que quizá ya había agotado su etapa en la selección.

Un saludo!

Marco dijo...

No se por que no se actualizan los post en mi lista de blogs donde los tengo incluidos. ???

Ariel dijo...

@ Garrincha:

Angloma dejó de jugar definitivamente después de la Copa de Oro de 2007, cuando vestía los colores del club L'Etoile de Morne-à-l'Eau (precioso nombre)

Ya tiene 43 años y es casi imposible un nuevo retorno, pero quién sabe si en Guadalupe no lograrán convencerlo para volver a la Copa de Oro.

En un equipo como ese, su sola presencia potenciaría ampliamente a todo el conjunto.

Esteban dL dijo...

muy buena noticia, veremo' si los reggae boyz vuelven a lo que en una epoca supieron llegar, jugar una copa del mundo...
saludos!!!

Estoja dijo...

Iba a hacer la misma pregunta que Garrincha :-)
Qué pena que ya no siga jugando. Aunque claro, ya le iba tocando.

No tenía ni idea que John Barnes era el seleccionador jamaicano. A ver si finalmente consigue hacer algo bueno desde los banquillos.

Martín dijo...

Jo, John Barnes...aun recuerdo su cromo de un Album sobre el Mundial de Mexico 86...como pasa el tiempo, sniff