Extraño Benfica

Lance del Benfica v Inter de anoche

El empate 3-3 de anoche ante el Inter de Milán resume a la perfección lo que llevamos de temporada del Benfica. Antes de entrar en ese encuentro, recapitulemos: en verano se marchó el goleador Gonçalo Ramos al PSG, llegando para sustituirle el brasileño Arthur Cabral (Fiorentina), así como Gonçalo Guedes (Wolverhampton), que amplió su cesión de la campaña pasada. En enero de este 2023 Enzo Fernández se marchó traspasado al Chelsea por una cifra desorbitada de 121 millones de euros.

Evidentemente tras éste último movimiento de mercado, del que ha pasado casi un año, han sucedido más cosas. Pero ahí se rompió algo. Todo el dinero que ganó Rui Costa para su club lo perdió en potencial deportivo sobre el césped. Porque un Benfica que la 22/23 ganaba y goleaba, pasando por encima de equipos como Juventus y París Saint-Germain, podía aspirar a dar un golpe sobre la mesa llegando lejos en Champions. Se quedaron a medio camino, cayendo en cuartos de final ante un Inter que les venció por un global de 5-3 con bastante comodidad.

Las Águilas son un club que se mueve estupendamente en el mercado, sobre todo en el sudamericano, aunque también desarrollan jóvenes perlas europeas. Al igual que se incorporó hace unos meses el medio turco Köçkü (campeón con el Feyenoord), también llegó un veterano de indiscutible calidad y jerarquía como Ángel Di María, que regresaba a la entidad lisboeta 13 años después de llenar su arcas dirección Bernabéu. Con los Otamendi, Joao Mário, Trubin, etcétera les queda un buen equipo, en teoría más que competitivo... pero no está siendo tan así.

No sé si será cuestión de alguna pieza que falte, de ajustes, de mejora de sus rivales, pero el paso atrás respecto al curso anterior es evidente. Lideran la liga junto al Sporting merced a una improbable remontada en el derbi lisboeta, se llevaron la Supercopa ante el Porto, pero en Champions, que es donde los grandes demuestran de qué pasta están hechos, su desempeño actual está siendo muy flojo. Sobre todo en contraste con lo que mostraron tan solo unos meses atrás.

Ya a los 13 minutos del debut ante el Red Bull Salzburg tocó comenzó a torcerse con la roja y penalti que les lastró. Los austríacos vencieron 0-2. Luego visitaron Milán, donde tuvieron algunas buenas ocasiones, pero cayeron 1-0. Tras esto cedieron dos derrotas sin paliativos ante la Real Sociedad, llegando al duelo de anoche ya eliminados, aspirando tan solo a un puesto en Europa League.

Y como el Benfica 23/24 está riendo bastante raro, anoche se plantó ganándole al subcampeón de Europa (con 8 cambios en su alineación habitual) por 3-0, con hattrick de un Joao Mário fantasmagórico hasta el momento. Qué gran resultado para crecer en lo restante, para creer de nuevo en su grandeza. Pero meu amigo, 3-3 final y gracias, que en el 90+5 disparó Barella a una escuadra que lo repelió porque le seducía ese empate definitivo.

En un par de semanas tendrá el Benfica una nueva reválida. Visita a Salzburgo para intentar seguir vivos en Europa, además de duelo posterior ante el siempre incómodo Sporting Braga. Habrá que seguir la evolución para ver si el equipo es capaz de mejorar su extraña trayectoria, o ver si prosiguen los tumbos en un proyecto que realmente tiene calidad para más.