Cara y cruz en el derbi paulista

Itaquerão, lleno justo antes del comienzo del choque.

Un lunes por la noche es una fecha extraña para un encuentro de máxima rivalidad. Sin embargo, no fue problema para llenar el Itaquerão con 46.473 almas ávidas de asistir a un derbi paulista vital para las aspiraciones de sus protagonistas. De un lado, el local Corinthians, pugnando por la salvación días después de caer eliminado en semifinales de la Copa Sudamericana. Enfrente, un Palmeiras que se agarra a la lucha por el título, a tan solo tres puntos del líder Botafogo. Un empate no haría gran diferencia en sus aspiraciones, pero una victoria ante uno de los máximos rivales históricos, además del golpe asestado al adversario, reforzaría las filas propias en la búsqueda del objetivo. 

Por ello, ninguno de los dos se guardó nada. No podían permitírselo los de Ramón Díaz, reforzado con la figura de un Memphis Depay que ha aportado desde el primer día. Tampoco un Abel Ferreira que ha ganado títulos importantes todos los años desde que llegase al Verdão. Una racha espectacular que corre peligro este 2024, toda vez que se ha llevado el Paulistão (tercero consecutivo), trofeo que tiene peso a nivel local pero que sabe a poco teniendo en cuenta el nivel de la plantilla y el reciente bagaje de Palmeiras.

El caso es que un primer tiempo igualado se decantó a favor de Corinthians tras aprovechar una cadena de errores del vigente bicampeón brasileño. Primero, apretaron para forzar el fallo en la salida de Palmeiras. Luego, una pifia en el despeje llegó a Matheus França, quien tras un par de recortes cedió para que Rodrigo Garro anotase desde la frontal con un disparo seco, bajo, junto al poste. En el segundo periodo, un pase en profundidad del propio Rodrigo Garro permitió a Yuri Alberto batir por bajo a un Werverton que se quedó a media salida, facilitándole la labor al atacante corinthiano.

Tras el 2-0 el Timão se replegó, cerrando huecos a un Palmeiras que se volcó para recortar distancias cuanto antes. Casi lo consigue, pero el larguero, un Hugo Souza muy seguro y la zaga local les impidieron meterse en el encuentro. La victoria permite a Corinthians obtener un pequeño colchón respecto a la zona de descenso, que queda a 4 puntos. Si no pierden en el duelo directo del sábado ante Vitória, comenzarán a cimentar una salvación que no debería peligrar. 

En cuanto a Palmeiras, el balance del traspiés deberá valorarse en función del derbi carioca entre Botafogo y Vasco. Si el Fogo es capaz de vencer, aumentará a 6 puntos su ventaja, a falta de 6 jornadas para el final del Brasileirão. En la antepenúltima jornada los alvinegros visitarán el Allianz Parque, el gran partido decisivo por el título, que llegará unos días después de que el propio Botafogo dispute la final de la Copa Libertadores. Casi nada lo que van a vivir estos dos equipos las próximas semanas. Eso sí, el que festeja hoy es Corinthians, que está a otros asuntos.