Copa Asiática: hora de definiciones

En esta época del año, cuando la ausencia del fútbol se hace sentir, apenas hay algunos torneos en curso. Uno de ellos es la Copa Asiática, el máximo certamen de selecciones en aquel continente. Se aproxima el final de la competencia y los cuartos de final dejaron algunas cosas interesantes:

Japón y un arquero interminable

Nipones y australianos se volvían a ver las caras un año después de su enfrentamiento en Alemania 2006. John Aloisi puso en ventaja a los nuevos miembros de la AFC cuando promediaba el segundo tiempo, pero su equipo no pudo mantenerse arriba en el marcador. Apareció Naohiro Takahara, máximo artillero del torneo, y decretó la igualdad pocos minutos más tarde. Los instantes finales transcurrieron sin mucho para destacar, con dos selecciones que esperaban el cruel veredicto de los penales. Allí apareció la figura del veterano Kawaguchi, quien contuvo los remates de Harry Kewell y Lucas Neill para llevar al defensor del título a semifinales. Este arquero completó su partido número 104 con la camiseta de su país. Fue titular en Francia 98 y Alemania 2006, mientras que vio la acción desde el banco de suplentes en Corea-Japón 2002. Tuvo un paso por el Portsmouth inglés y también se desempeñó en la liga de Dinamarca. Sus compatriotas, agradecidos por su actuación en esta jornada.


El duelo de antiamericanos y la generación olímpica

Resultaría imposible no asociar a Irak y Vietnam como eternos enemigos de Estados Unidos. El destino del fútbol hizo que estos dos países se cruzaran en los cuartos de final de la Copa Asiática. Cuestiones políticas al margen, los de Oriente Medio se mostraron muy superiores al último de los organizadores que se mantenía en el torneo. El resultado final fue 2-0, con goles del potente delantero Younis Mahmoud, uno de los tantos integrantes del plantel iraquí que participaron de la obtención del cuarto puesto en los Juegos Olímpicos de Atenas. Esta generación de futbolistas está empezando a mostrarse en la selección mayor. Si sostienen su progreso, no sería extraño ver a este país buscando su segunda participación en un mundial (ya estuvo presente en 1986).

Corea sueña, Arabia sigue firme

Irán había terminado la primera fase siendo uno de los equipos más sólidos, con un funcionamiento bastante equilibrado. Sin embargo, falló en el momento crucial, no pudo mostrar nada interesante en el duelo ante Corea, perdió por penales tras un empate sin goles y se despidió de la Copa con sabor a decepción. Los orientales, uno de los países más fuertes de este continente, siguen exhibiendo un rendimiento bajo y sus figuras permanecen ausentes, pero por ahora les alcanza para meterse entre los mejores.
En el último de los partidos de cuartos de final, Arabia Saudita no encontró muchos inconvenientes para superar por 2-1 a Uzbekistán, que venía en ascenso luego de una buena fase de grupos. Un gol en el inicio le dio la tranquilidad al conjunto verde, que controló las acciones durante todo el juego.

Las semifinales quedaron programadas así:
Irak — Corea del Sur (en Malasia)
Japón — Arabia Saudita (en Vietnam)

Sólo dos equipos estarán el próximo domingo en Yakarta para definir quien se queda con la Copa. La lucha ya está planteada, ahora hay que esperar por los ganadores.