Fútbol,té y Carbón

La revolución industrial y la mejora de los transportes, con la consiguiente expansión comercial ,avivada mas aun por el crecimiento desbordante de la población y el auge del imperialismo, hicieron de la segunda mitad del siglo XIX el terreno ideal para el surgimiento de toda una serie de “self made man”, hombres que amasaron grandes fortunas partiendo de orígenes humildes, nuevos ricos que eran vistos con desconfianza por los sectores elitistas de la población que juzgaban a la gente no por las libras que guardaran en el banco, sino por los cuadros de los antepasados que jalonaran los oscuros pasillos de sus mansiones…

Y de uno de estos “Hombres mas que nombre” vamos a hablar a continuación, pero no porque si, sino por su relación con uno de los primeros trofeos de fútbol de carácter internacional, Sir Thomas Lipton.

Escocés de Glasgow, al parecer de procedencia irlandesa, emigro muy joven a la “tierra de las oportunidades”, a los renacidos Estados Unidos, pues justo cuando llego allí, 1865, acababa de terminar la guerra de secesión (de hecho empezó a trabajar en plantaciones de tabaco en el derrotado sur, y de ahí paso por una larga lista de ocupaciones). Regreso a su tierra tras cinco años, y tras abrir una tienda de comestibles, con mucho éxito(de América había vuelto con las enseñanzas de lo que podía hacer la publicidad, a su llegada provoco un atasco de trafico al hacer desfilar por las calles a unos cuantos cerdos que sobre su piel llevaban escrito:”I,m going to Lipton´s.The best shop in town for irish bacon”), emprendedor como era se lanzo a una expansión comercial continua, que en 18 años(1870-1888) le condujo a poseer 300 sucursales(entre 1880 y 1890 paso de 30 a 300)…y fue en ese momento, cuando se lanzo al negocio por lo que es conocido ahora su nombre en todo el mundo, el té, sector en el que fue el primero en patentar las “bolsitas”, y en introducirse en los hogares de los sectores medios y bajos de la sociedad, al bajar los precios. El fue la persona que más hizo para volver a los ingleses (y no solo a los aristócratas) adictos al té…(¿como se diría, tetoinomanos? aunque claro, con ese nombre uno no sabe si se esta refiriendo a adictos al te o a la teta...)

Una vez varias veces millonario, se dedico a su pasión por los deportes, codeándose con la realeza, sobre todo debido a su afición a la vela (donde intento recobrar la copa América, siempre derrotado, siendo reconocida su persistencia con un trofeo “Al mejor de todos los perdedores”, y sobre todo, con que su marca de se te convirtiera en extremadamente conocida en USA...algo que conociéndole, no fue pura casualidad.

En 1898, la reina le nombro Sir, y no mucho después, en 1904, el rey de Italia Caballero de la orden real. Y fue precisamente esto lo que nos lleva al asunto que nos interesa. El embajador italiano en el Reino Unido, le sugirió que la mejor forma de agradecer el nombramiento, seria organizar un torneo deportivo en Italia. En 1909 invito a las federaciones inglesa, suiza, alemana e italiana a enviar a sus equipos mas prestigiosos e Turín, donde tendría lograr el trofeo que iba a llevar su nombre, el trofeo Sir Thomas Lipton. Todas aceptaron, salvo la federación inglesa, que aun consideraba en esos tiempos casi un deshonor el competir con los inferiores equipos de fuera de las islas. Así pues, en lugar de un conjunto enviado oficialmente por la federación, un miembro de la liga de primera, el representante ingles fue el West Auckland , un equipo amateur del norte de Inglaterra, de la Northem league, integrado en su mayoría por mineros del carbón. Sobre el porque de invitar a este desconocido conjunto, una teoría(posiblemente falsa, pero hermosa) cuenta que Sir Lipton le escribió a su secretario que invitara al W.A., al Woolwich Arsenal (el Arsenal actual), pero que este se confundió e invito al West Auckland…sea cual fuera el motivo, el hecho es que el equipo acepto entusiasmado la invitación, aunque los jugadores tuvieron que vender sus posesiones para poder pagarse el viaje…(“les dijeron que vendieran los muebles…pero en esa época no teníamos de eso en casa”, cuenta el hijo de uno de estos héroes). La cosa es que 13 futbolistas abandonaron sus hogares para disputar el torneo la primavera de 1909. El primer partido, la semifinal, jugada el 11 de abril, termino con un triunfo por 2 a 0 sobre los alemanes del Stuttgarter Sportfreunde. En la otra semifinal, el Winterthur suizo derrotaba al combinado local (formado por jugadores de la Juve y el torino principalmente), por 1 a 2. Los turineses quedaron finalmente terceros en la competición, al vencer 2 a 1 a los alemanes, mientras…

En la final, el 12 de abril (si, justo un día después de la semifinal), los chicos del carbón se deshicieron por 2 a 0 del conjunto helvético, haciéndose de este modo con el preciado trofeo, con el rey Víctor Enmanuel III y Sir Lipton como espectadores de excepción.

En el viaje de vuelta, con sus medallas en el cuello, el trofeo fue extraviado(al parecer se lo dejaron olvidado en la estación de tren de Paris, debido al estado de embriaguez en el que se encontraban los jugadores), siendo enviado posteriormente a casa por un conserje parisino…

Dos años después, volvió a organizarse la competición, y como campeón, el conjunto negro con escapulario naranja fue invitado a defender su titulo. De nuevo tuvieron que pagarse el viaje, y solo cuatro de los componentes del equipo campeón dos años antes pudieron repetir la “excursión”. Después del largo viaje en tren, disputaron la semifinal del torneo contra…según los datos oficiales, contra el Zurich Suizo, según algunos jugadores ingleses, contra el Torino… (Esto nos da idea de lo difícil de establecer la fiabilidad de los datos antiguos, o bien de que habría que ver si aun les continuaba la cogorza a los de las islas, incapaces de distinguir a sus rivales…) La cosa es que ganaron, y en la final se enfrentaron a la Juventus italiana.

Y aquí si que coinciden los datos, para hablar de una humillante derrota juventina por 6 goles a 1, con lo que los ingleses conservaban el trofeo (y daban en parte la razón a los federativos ingleses, que pensaban que su nivel era tan superior a los continentales que no merecía la pena enfrentarse a ellos…). Tras esta victoria, los “mineros” jugaron una serie de amistosos por Italia (contra una especie de selección italiana, un combinado milanes y el Genoa), venciendo dos de ellos, y empatando con los ligures.

Tras estos éxitos, los componentes del equipo retornaron al mundo real, lleno de deudas, que provocaron la quiebra del equipo en 1912(seria refundado en 1914 como West Auckland Town, que lleva como escudo el trofeo ganado tan bravamente) y la primera perdida de dicho trofeo, que tuvo que ser cedido a cambio del pago de una deuda a la propietaria de un hotel de la localidad, no siendo recuperado hasta 1960, para posteriormente perderse(¿definitivamente?) en 1994, tras ser robado del club de trabajadores donde se encontraba.

Sin duda esos “viejos buenos tiempos” terminaron hace mucho, y el equipo, ahora en novena división (y penúltimos), solo puede celebrar alguna victoria en el derbi contra sus archirivales del Bishop Auckland. Pero…a ver quien les quita el poder decir que una vez, hace mucho, mucho tiempo, aplastaron bajo sus botas a la vecchia signora, y ganaron la que algunos (exagerados ellos…)denominaron “primera copa del mundo”…

Por otra parte, Sir Thomas dejo de interesarse por el deporte del balón para concentrarse en la vela, aunque…no es este el único vestigio dejado por “Sir T” (como se le llamaba con cierto retintín) en el planeta fútbol, ya que también dono otro trofeo, la copa Lipton, que se disputo durante muchos años, desde 1905, entre Argentina y Uruguay.

Lo que puede dar de si “a nice cup of tea”…

Posdata:Os recomiendo, a los interesados en el tema, la lectura de este interesante relato sobre los hechos.

Posposdata: Y como se que cuando has visto la camiseta del equipo se te hizo la boca agua Chimo, te pongo un enlace para que puedas pillartela...o al menos soñar con que puedas tenerla.

5 comentarios:

chimoeneas dijo...

genial el artículo. son impresionantes esos personajes decimonónicos que lo mismo te hacían un emporio del té que te organizaban competiciones de fútbol.
y tenía un lío porque yo confundía la copa lipton de argentina con este trofeo de clubes.
aunque sea un blog de fútbol, las historias de este hombre, la copa américa y su barquito, el Shamrock, también son apasionantes (un auténtico perdedor, el pobre hombre...).

más cosas:
-la historia del "W.A.", aunque parece poco real, está muy buena.
-tarjeta amarilla por lo de "adictos a la teta"
-la camiseta me parece hasta elegante, va poco conmigo, eh?
-acabo de conocer a este equipo, pero el bishop auckland me da mala espina

Martín dijo...

Sus barquitos mas bien, que no fueron ni uno, ni dos, ni tres...

Sobre la tarjeta amarilla, la asumo sin protestar, pero no puedo evitarlo, me pasa como a Asimov, los juegos de palabra malos son lo mio...

Y si, despues de ver tu intimo contacto con el estadio de la condomina, sin duda la palabra elegante queda descartada en relacion a ti...

chimoeneas dijo...

efectivamente, por lo menos hubo cuatro shamrocks, pero todos acabaron fracasando.

para limpiar mi imagen, debo hacer algunas aclaraciones sobre mi "affaire" con la nueva condomina: en realidad todo responde a que en una excursión que hice con mis amigos a moratalla, me puse "pesado" insistiendo en visitar el estadio del murcia (aprovechando que la autopista pasa por al lado). pero como no tuve éxito (no conducía yo), mis amigos me calmaron diciendo: "bueno, ya iremos un día y hasta tendrás tiempo de frotarte contra la condomina". y así fue.


pd: a pesar de todo, me gusta más el nestea que lipton tea.

Danimon dijo...

Hola, es la primera vez que veo vuestro blog y acabo de descubrir que me encanta.
Sólo un dato más: Hay una película, que vi hace muchos años, que fue la que me descubrió este torneo. Se llama "The World Cup: A Captain's Tale" http://spanish.imdb.com/title/tt0084918/


Vedla si podéis, es muy interesante...

Martín dijo...

Gracias por el dato Daemon, no lo conocia, lo que no se es si se podra encontrar en castellano...