Bundesliga: sinónimo de espectáculo

Marco Reus, rompiéndola esta campaña
Tomar un tren que recorre cientos de kilómetros alquilado para trasladar a mil hinchas. Llenar tu cancha a reventar, ahogando al rival en tus cánticos. Además de los ambientazos espectaculares, grandísimos partidos, equipazos que los respaldan y cracks reafirmados y nacientes. Allá donde miremos, de un lustro a esta parte, coincidiendo con el Mundial disputado en tierras germanas, la Bundesliga es una fiesta ya sea en la grada o sobre el terreno de juego, algo que se confirma cada fin de semana.

Este último finde no iba a ser una excepción, aunque sí que hubo un bombazo que ha trastocado los guiones de todos los que seguimos apasionadamente la liga alemana: la derrota del Bayern en Maguncia, segunda consecutiva que los baja del liderato cuando parecía que nadie podría hacerlo. ¿Qué ha cambiado en el club bávaro en las últimas semanas? Quizá sea muy reduccionista, pero el equipo está acusando la baja de Scweinsteiger más de lo que quisiera poder admitir Jupp Heynckes, que perdió la pieza clave de su engranaje.

Desde entonces todo parece haberse venido abajo. Cayeron en Hannover, aunque el 4-0 al Nürnberg en el derby devolvía las aguas a su sitio. Sin embargo, las victorias por la mínima ante Nápoles y Ausburgo llenaron de dudas el vestuario, ya que fueron zarandeados por los napolitanos tras ir ganándoles 3-0 y por el colista del campeonato, al que ganaban 0-2 y casi les iguala en el último instante. La derrota ante el Dortmund en el Allianz Arena supuso un varapalo difícil de digerir, ya que de haber ganado no solo serían líderes sino que hubieran dejado a los vigentes campeones 8 puntos por debajo. En Champions ganaron sobrados al Villarreal, aunque el Mainz les dio ayer otro sopapo del que los próximos días veremos las consecuencias. Por lo pronto, ahora son terceros.

¿Quién ha tomado la punta? De forma compartida, Borussia Dortmund y Borussia Mönchengladbach, los dos únicos que han asaltado la casa del Bayern este año, y los dos únicos que parece que de verdad pueden aspirar al trono a final de temporada junto con el propio conjunto muniqués. Ambos ofrecen ese soplo de aire fresco, de alternativa al poder, que necesita todo gran campeonato.

Sinceramente, como hincha del Dortmund no me acabo de explicar cómo hemos llegado hasta aquí. A principios de campaña se notó una barbaridad la ausencia de Nuri Sahin, ya que Gündogan, fichado del Nürnberg para sustituirlo, no ha dado la talla. Luego han estado lesiones graves como la de Lucas Barrios, los altibajos de Kagawa (que aún no está al nivel de la pasada temporada) y constantes cambios de mediocampo hacia arriba, donde ahora J.Klopp no puede contar con Bender pero aparece el imberbe Leitner. Tras un montón de varapalos y aún con la remota pero ilusionante posibilidad de alcanzar los octavos de la Champions la próxima semana, el Borussia Dortmund resurge poco a poco.

En cuanto al Glabach, ¿qué decir de ellos? El año pasado a estas alturas acababa de llegar el suizo Lucien Favre, auténtico hombre milagro y gran culpable de la magnífica situación del histórico conjunto del ‘bajo Rin’. El equipo se encontraba en una situación lamentable, condenado al descenso a falta de unos meses para acabar la competición. Pero remontaron, salvándose con todo en contra. Ya en verano, comenzaron ganando 0-1 al Bayern con un tanto del punta belga Igor de Camargo, lesionado de gravedad poco después. Dio igual, ya que Marco Reus adelantó su posición para dar lo mejor de su carrera hasta el momento, un primer tercio de Bundesliga memorable. Además Juan Arango, viejo conocido en Mallorca, es el máximo asistente no ya de su equipo, sino del país. Mike Hanke o Herrmann son algunos de los nombres que acompañan en un plantel ilusionante que despliega un fútbol precioso, entretenido y lleno de fuegos artificiales.

Del resto, el Werder Bremen es el animador de siempre pero nadie puede tomárselos en serio, más aún con una defensa que es un auténtico coladero. Razón aquí. Tampoco Schalke 04 parece llamado a pelear de verdad por el título pese a la gran batería de atacantes que posee, aunque andarán por ahí arriba dando guerra.

Este es el brillante presente de la Bundesliga, que cada fin de semana nos maravilla con sensacionales partidos repletos de emoción. Un campeonato que cada día tiene menos que envidiar a la Premier League, y al que algunos miramos en España con una mezcla de admiración y suspiro.

2 comentarios:

cityground dijo...

Me gusta bastante la Bundesliga actual. El Bayern no domina con tanta superioridad, hay bastantes equipos históricos y con mucha afición, y los partidos suelen ser abiertos y entretenidos.

Los dos Borussia en cabeza, el del Monchengladbach una sorpresa muy agradable porque hace un año por estas fechas parecía condenado al descenso, la pena que haya sido esta jornada a costa de mi Colonia.

Pablo - punta este dijo...

Esta Bundesliga está muy pareja, igualmente pese a los ultimos partidos del Bayern, ellos van a levantar su nivel de juego cuando vuelvan algunos jugadores clave y son los favoritos, lo que sí el equipo debería contratar algún defensa para el desafío de la Champions.