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| Unos festejan, otros lloran. |
Anoche finalizó la primera fase del Sudamericano sub20 más sorprendente de los últimos años con el batacazo más inconcebible e inesperado de lo que llevamos de torneo: una enorme Perú dejó en la cuneta a Brasil tras derrotarle por 2-0, un resultado incluso corto para lo que ambos mostraron sobre el césped. De este modo la vigente tricampeona se despide no solo de la posibilidad de revalidar su corona, sino también de poder disputar el Mundial de la categoría que se llevará a cabo en Turquía entre Junio y Julio próximos.
Para colmo, Brasil ha sido última de grupo, "honor" que comparte con Venezuela, también eliminada de la justa. Pero la verdeamarelha no ha sido la única que ha padecido estos días. Argentina, el otro gigante de la CONMEBOL que además ejercía de anfitrión, dio vergüenza ajena en cada partido, responsabilidad exclusiva de Trobbiani (y Humberto Grondona, el que lo puso ahí), posiblemente el peor técnico de todo el país. Ni la victoria final ante Colombia le sirvió a los Iturbe, Vietto, Centurión y compañía, ya que Paraguay venció también su duelo, por lo que la albiceleste finaliza penúltima de su grupo.
El Hexagonal final comenzará mañana sin los dos gigantes, pero con los seis mejores combinados nacionales del continente. No es una afirmación al pedo (?), es la realidad que se ha visto sobre la cancha estos días en Mendoza y San Juan. Chile se presenta como gran favorita para adjudicarse un torneo que nunca ganó, siendo la única que ha vencido sus cuatro partidos anteriores, si bien todos los demás parecen encontrarse a un nivel bastante parejo. Uruguay, dominador histórico hasta principios de los años 80, lleva demasiado tiempo sin vencer una competencia que Paraguay y Colombia también saben lo que significa ganar. Por último Ecuador y Perú intentarán saborear por primera vez las mieles del éxito.
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