Tan cerca, tan lejos

Abrashi y Danny, en un lance del partido.
Albania es uno de esos países cuya selección se ubica dentro de ese grupo que lleva unos años creciendo poco a poco, mejorando su nivel para intentar dar el salto necesario que les sitúe en el mapa internacional. El objetivo obvio es pelear por clasificarse para Mundiales y Eurocopas, siendo conscientes que para ello es necesario pelear cada punto que les haga mejorar su ranking para así obtener sorteos más benévolos. Todo ello si sus jóvenes no han emigrado a jugar para otro país, como los casos de Shaqiri, Mustafi, Januzaj y tantos otros.

En la fase clasificatoria para Brasil 2014 ya evidenciaron una notable mejoría, aunque una mala recta final les alejó del sueño mundialista. En esta ocasión, ocupando el único grupo con 5 aspirantes a la Euro 2016, comenzaron con un triunfo de ensueño en tierras lusas. A ello le siguió un esperanzador empate como locales ante Dinamarca así como la polémica victoria (en los despachos) en Belgrado. Otros tres puntos ante Armenia les colocaron líderes con diez puntos de doce posibles a falta de una segunda vuelta tan emocionante como potencialmente peligrosa. Esta vez viajaron hasta el norte, donde arrancaron otro empate a la Dinamita Roja, lo que les aseguraba mantenerse en la pomada.

Anoche recibían en el interior del país, en Elbasan, a la poderosa Portugal, la gran aspirante a vencer el grupo, uno de esos combinados que el año que viene se permitirán soñar con alzar el título continental. Los lusos hicieron pesar su favoritismo desde el primer momento, avasallando a Albania en un primer tiempo en el que tan solo el poste y el buen hacer de Berisha evitaron el tanto de los visitantes. Los balcánicos aguantaron el tipo hasta el descanso, saliendo más fuertes de vestuarios tras el mismo. Ahí plantaron cara a su rival, manteniéndose fuertes atrás para salir con mayor convicción a la contra. En una de estas acciones un remate de Sokol Cikalleshi rebotó en un zaguero tomando una parábola imposible para Rui Patricio, el cual observó impasible como el esférico... 

...tocó la cruceta. Ahí estuvo no solo el gol, si no medio billete para Las Águilas. El choque nunca acabó de alcanzar un ritmo alto, pero en su recta final se sucedieron varias ocasiones en cada bando que bien pudieron desnivelarlo. Todo hasta que en el descuento un tiro de esquina acabó en la red albana tras cabecear primorosamente Miguel Veloso para darle el triunfo a Portugal, líder y prácticamente clasificada gracias al tanto del centrocampista. Un minuto después los jugadores de Albania se desplomaban sobre el césped tras el pitido final. Remaron mucho aunque no pudieron obtener recompensa, llegando su primera derrota de un modo doloroso, en casa y sin tiempo de reacción.


Pese a la oportunidad que dejaron escapar anoche no todo está perdido para Albania. Al contrario, aunque son terceros (no les pueden alcanzar sus rivales) están a un solo punto de Dinamarca, a la que le falta un único partido por disputar, precisamente en Portugal. Por el contrario a los balcánicos les faltan dos encuentros, uno que será ardiente en casa ante una Serbia con ganas de venganza, y otro definitivo en Armenia para cerrar la fase. En sus manos está alcanzar aún el mayor sueño deportivo que jamás ha tenido la nación balcánica. Será emocionante comprobar si son capaces de llevarlo a cabo.

1 comentario:

Jorge Edoardo dijo...

Está muy padre el blog, saludos.