RFEF: Villar, Rubiales, Louzán... la maquinaria sigue adelante

Rafael Louzán, presidente de la RFEF.

Pasan los años, transcurren las décadas, cambian los presidentes, pero todo sigue absolutamente igual en la Real Federación Española de Fútbol: corrupción total, desvergüenza máxima en pleno apogeo. Para sonrojo de aquellos que amamos este deporte, y que además compartimos nacionalidad con esta troupe de directivos sin escrúpulos, es imposible no querer ver a la Federación arder (figuradamente) desde sus cimientos para ver si así consigue reconstruirse sin serpientes en el gallinero, ni Territoriales contaminadas.

Las últimas horas han dejado al balompié patrio hecho un erial. Por un lado, tres días después de los bochornosos hechos denunciados por aficionados y familiares del Real Mallorca durante la semifinal contra el Real Madrid, el nuevo presidente electo de la RFEF, Rafael Louzán, reconoce en una entrevista que está pensando en ampliar el contrato que lleva la Supercopa española a Arabia Saudí. Se extendería hasta 2034, año en que se disputará otro Mundial de la vergüenza. No contento con ello, añadió que posiblemente la Supercopa Femenina se sumaría.

Rafael Louzán, condenado por prevaricación, se jactaba del buen trato que reciben los españoles en Arabia Saudí. Todo ello sin mostrar un ápice solidaridad con esos aficionados mallorquinistas que sufrieron vejaciones unos días antes. En un país que se hunde en las listas referentes al respeto por los Derechos Humanos y la Libertad de Prensa, donde tras tocamientos y fotos no consentidas a hinchas españolas abandonadas a su suerte, se anuncia que es posible que la Supercopa Femenina vaya también para allá. ¿A que suena idílico?

Si en 2023 nos congratulábamos por la destitución de Rubiales, actualmente inhabilitado por la FIFA, todavía no podemos olvidarnos del predecesor de éste. El que fuera máximo mandatario del fútbol español entre 1988 y 2017, Ángel María Villar, ha sido propuesto hoy por un juez de la Audiencia Nacional por ser juzgado por un supuesto delito de apropiación indebida que también implicaría a su hijo Gorka.

¿Más? Claro, esto es el fútbol español, siempre hay porquería que destapar: Miquel Bestard, que fuera 2º vicepresidente de la RFEF, ha sido citado a declarar por la Audiencia Nacional el 28 de enero, también acusado de apropiación indebida. Y más todavía: "El Juzgado de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional ha procesado por delitos de corrupción a los expresidentes de la Federaciones Tinerfeña de Fútbol, Juan Antonio Padrón, e Interinsular de Fútbol de Las Palmas, Antonio Suárez, en dos piezas separadas del caso Soule." La noticia puede leerse al completo aquí

Sale un corrupto y entra otro. Una maquinaria de descrédito que sigue adelante pese a los infinitos casos de corrupción que la salpican. Una maravilla el estado del fútbol federativo en España. 

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