Adios, Stefan, hasta pronto, Hamrun
Duele. No todo en el fútbol es hermoso, no todo son alegrías, trofeos, premios, ascensos, triunfos. De hecho, tal vez abunde mas lo segundo, las decepciones, el no pudo ser, la amargura del descenso, la tristeza en la derrota, la melancolía del final.
Y es que de lo que hoy tengo que hablar, es algo que hubiera preferido cien veces evitar, pero…el fútbol, como la vida, no es un cuento de hadas, hay cosas buenas, pero también otras malas, hay momentos de risas, pero al lado aguardan las lagrimas. Y tal vez, para ser completa de verdad, para que nos demos cuenta de lo que puede significar una sonrisa, para que sepamos aprovechar esos efímeros días de una felicidad, tan esquiva como ficticia, que nos encontramos de tanto en tanto, hay que sufrir alguna vez.
Tengo pocos ídolos en el mundo del fútbol. De hecho, tampoco en casi ningún otro ámbito. Puedo tener admiración por determinadas figuras, pero ese paso que existe entre la admiración y la devoción, me es muy difícil darlo …tal vez por miedo a la decepción, tal vez porque hay muy pocos santos (si es que existe alguno), y siento que nadie es perfecto…lo cual en realidad, hace que todo cobre mas valor, porque lo bueno que se hace, se hace desde la imperfección, lo cual tiene mucho mas mérito...
Lo mas cercano que he podido estar a ese tipo de sentimiento dentro del mundo del Deporte, en los últimos tiempos, lo ha sido con la figura de un futbolista semianonimo, al borde del retiro, que jugaba en una liga perdida, en un país lejano, lo mas parecido a un naufrago abandonado en una isla desierta.
Sultana. Stefan. 40 años. 197 goles en la Premier league maltesa, mas que ningún otro jugador de la historia. 26 temporadas disputadas, todas, salvo dos, en Primera. 23 de ellas jugando en el club que le vio nacer, crecer, y ahora retirarse, el Hamrun Spartans. Desde los 15 años en activo, temporada 83/84...hasta el pasado Domingo.
Unos días antes, conocíamos que este había sido su último año como jugador en activo. Y aunque, como el comentaba, hubiera preferido despedirse el un partido sin nada en juego, no pudo ser. De hecho, su ultimo encuentro se trataba de un choque vital, donde su equipo se jugaba el ser o no ser, la permanencia o el descenso…
Y, para que todo fuera mucho mas complicado, tenia que disputarlo como titular (algo que no habia hecho apenas en toda la temporada), debido a la plaga de sanciones del equipo, que dejaban fuera a cuatro jugadores, dos de ellos, Silvano Convalius y Gaetan Spiteri, de los mejores jugadores del club. Difícil panorama.
El Hamrun dependía de si mismo, pero debía ganar. Enfrente, un Qormi que había comenzando la liguilla de relegación como ultimo clasificado, y que la terminaba liderándola.
El partido fue una lucha imposible, entre un equipo que venia en una dinámica muy positiva, y otro enormemente mermado por las bajas. Un penalti a favor del Qormi finalizando la primera mitad, daba ventaja a esto. Minutos antes, Stefan recibía una amarilla, al introducir un balón en la portería…con la mano (Si, si lo llega a hacer Maradona…).
A pesar de la lucha, el Hamrun no estuvo acertado, ni nuestro héroe, que fallo alguna clara ocasión de igualar la contienda. Y la tragedia se hizo inevitable cuando el africano Alfred Effiong, la pasada campaña en las filas espartanas, lograba el segundo, en el 82…tu quoque fili mi.
Poco después, el final. De la temporada, de las esperanzas, de primera, de una carrera larga, apasionante, exitosa, modélica…y que sin embargo termina envuelta en amargura.
Y es que un solo punto, un solo punto hubiera salvado al Hamrun. Peor aun, se va a segunda con los mismos puntos que los otros dos equipos que le anteceden en la tabla, y que tienen que disputar entre ellos un encuentro de desempate para ver quien acompaña a los espartanos en su caída. Y es que las reglas maltesas dicen que en caso de empate a puntos se desbaratará de esa manera la igualdad…pero como fueron tres los empatados, se tenia que descartar a un equipo, y el Hamrun, al ser el conjunto con peores resultados en los enfrentamientos entre los tres implicados…si, se puede tener mala suerte, pero tanta acumulada, aun hace mas doloroso todo.
Tiempo. El tiempo lo cura todo, y aunque un poso de tristeza permanecerá siempre en su corazón, cuando dentro de unos años Stefan eche la vista atrás, espero que recuerde sobre todo los buenos momentos, que fueron muchos, sus éxitos, su impecable profesionalidad, los amigos que dejo y la gente que le apoyo, ante que un maldito resultado.
Y sobre el Hamrun…pues que el próximo año, la segunda Maltesa contara con un seguidor mas, deseoso de poder celebrar con ellos la vuelta a donde se merece, esa Premier que sin nosotros se ve tan vacía…
Gracias Stefan por todo, por tu ejemplo, por tu respeto a este deporte, por tu ayuda y tu buena voluntad respecto a nosotros.
Cuando hablé por primera vez de ti, no te conocía. Gracias a la magia de Internet y a este bendito Café, cumplí una ilusión, y de paso recuperé mi fe en el fútbol, en que a pesar de todo, merece la pena.
Como dicen por aquí, que te vaya bonito, te lo mereces.
Comentarios
Espero que dentro de un tiempo nos despidamos de Stefan como se merece, cuando el tiempo comience a cerrar heridas...
¿De quién es la versión? (porque Wayne Newton no es, ¿verdad?) Yo tengo esta canción en un single, pero en versión del otrora gran promesa Xoel Deluxe (porque vaya tela después). Esta: http://www.youtube.com/watch?v=rkc8nzEJepw
Seguro que Stefan no habría soñado ni en sus peores pesadillas que dejaría al equipo en segunda. Un jugador así lo daría todo por retirarse con el club en lo más alto.
Parece que cuando el balón no quiere entrar, no hay forma de hacerle cambiar de opinión... a veces, el fútbol es injusto.
Saludos!!
Los traumas del descenso se curan con el ascenso que seguro consigue el Hamrun la próxima temporada, y a Sultana su trayectoria lo recordara siempre como un grande en el fútbol maltes.
Es imposible dejar de considerar a este gran jugador como un ídolo. No todo tiene que ser espectáculo televisivo y millones de dólares en el banco para que un hombre se convierta en referente.
Implacable goleador, disciplina intachable, gran futbolista y mejor persona. Será difícil olvidar la trayectoria de Sultana.
Me imagino el dolor que sentirá por haber dejado al equipo en esta situación. Tuve el agrado de ser el traductor en cada una de las entrevistas y no era necesario demasiado esfuerzo para ver que hablaba de su club con el corazón, que realmente lleva al Hamrun en las venas.
Estoy seguro que el fútbol le dará revancha rápidamente. Hoy podrá parecer un final triste, pero la historia de Stefan y su equipo está lejos de finalizar. Seguramente volverá como entrenador y logrará tantos éxitos como en su etapa de jugador. Y si lo suyo no es sentarse en el banquillo, seguramente lo disfrutará desde la tribuna.
Los mejores deseos para este enorme delantero que acaba de despedirse.
Sonará extraño para algunos e inentendible para otros decir que es un ídolo, pero si el fútbol tuviera más hombres como él todo sería distinto.
Por un deporte con más Sultanas y menos payasos millonarios.
Suerte Stefan!
The song was released when Wayne Newton was 21 years old. Newton's effeminate timbre at the time is often mistaken for that of a female singer by those unfamiliar with the song
Asi que parece que si, que es "el" y no "ella". Yo pensaba como tu, menudo corte...
@London Road: El mismo nos comento que en su momento era mucho mas complicado jugar fuera de Malta, debido a la limitacion del numero de extranjero, y a que entonces Malta no pertenecia a la Union Europea. Ahora ya hay varios malteses jugando fuera. Eso si, estuvo muy cerca de jugar en Belgica.
Por otro lado, hay que pensar que son poco mas de 400.000, menos habitantes que la ciudad de murcia, se puede decir que hasta hay bastantes.