Conexiones (Goleadas en Islandia, Verne y Come on Eileen)

Hace casi un año, en uno de mis blogs preferidos (y que poco tiene que ver con el Fútbol), Tecnología Obsoleta, su creador, el genial Alpoma, escribía un fascinante artículo en homenaje a un legendario divulgador científico, James Burke. Este es conocido por jugar, tanto en sus escritos como en sus series, en ir tejiendo sus historias a bases de conexiones entre los protagonistas, hasta volver al punto de partida. Y hoy, tras mucho tiempo, me decidí a intentar hacer lo propio en un articulo, con el fútbol como horizonte, pero sin desdeñar agregar al rompecabezas un poco de literatura y unos acordes musicales…ojala salga bien la cosa.


Este domingo, en una lejana capital europea, se produjo uno de esos marcadores que quedan en la memoria, por lo cada vez mas raro de su presencia. 7-3, esos eran los dígitos que reflejaba el tanteador al final del choque entre los locales del KR Reykjavik, el mas laureado equipo del país, y el mucho menos glorioso Stjarnan Gardabaer.

Siendo bondadosos, uno intentaría apaciguar los decaídos ánimos visitantes hablando de que estas cosas le pueden ocurrir a cualquiera, y que tardan años en repetirse, pero...hace tres meses, casi día por día, en los 16º de final de la copa islandesa, y ante otro equipo de la capital, el Fylkir, el Stjarnan firmó exactamente el mismo resultado. Aquí podríamos hablar de su mala “estrella” (que es lo que significa su nombre en islandés), pero tampoco deberíamos dramatizar, a falta de un partido para el final de su liga, el equipo tiene la permanencia en la elite más que asegurada, algo importante para un club tan modesto.

Modesto, y sin embargo el principal representante deportivo en su población, la pequeña (como todas en Islandia, por otro lado) localidad de Garðabær, el sexto municipio en población de la isla del Hielo (con poco mas de 10.000 habitantes), que se encuentra situado dentro del área metropolitana de la capital (una pequeña zona que apenas representa el 1 % del territorio isleño, pero donde viven las dos terceras partes de los islandeses).

Lo más famoso de Garðabær son sin duda sus vistas. Y es que mirando hacia el oeste, se divisa, cuando el clima lo permite, el rotundo contorno del volcán Snæfellsjökull

¿Quién, entre los que en su edad mas temprana le picara el gusanillo de la lectura, no conoce ese mítico nombre? ¿Quien no acompaño, imaginariamente, a Axel, Hans y el profesor Lidenbrock en su descenso hacia el centro de la tierra, iniciado precisamente allí, en las calendas de junio?

Julio Verne, el autor de tan recordada novela, no fue precisamente ajeno a estas desiertas tierras boreales a lo largo de su obra. Desde llegar al polo con el capitán Hatteras, a trasladarnos al norte de Canadá en El país de las Pieles, viajar a Noruega por un billete de lotería, o su repetido uso de protagonistas escoceses (ya sea en el Rayo Verde, los hijos del capitán Grant o las Indias Negras), algo debió sentir por tan desolados parajes. Y por ello, no nos debe extrañar que en una de sus novelas menos conocidas, la caza del Meteoro, hiciera caer un meteorito (de oro puro), sobre la helada Groenlandia.

Y es que si antes hablábamos de isla de hielo refiriéndonos a Islandia, mucho más apropiada es sin duda tal denominación para la inmensa y casi deshabitada posesión danesa, poseedora del posiblemente menos apropiado nombre del mundo, a medias entre lo irónico, lo propagandístico y lo surrealista.

Y es precisamente allí, en Nuuk,la capital de la colonia, donde hace 32 años nacía uno de los mejores futbolistas daneses de los últimos tiempos, Jesper Grønkjær, que agota sus postreros años como jugador en el F.C. Copenhagen, tras pasar a lo largo de su carrera por equipos del nivel del Ajax, el Atlético o el Chelsea.

En la primera mitad de la temporada 2004-2005, que le vería finalmente recalar en Madrid, compartió vestuario en St Andrew con Maik Taylor, que aun continua en Birmingham. Lo de este guardameta es curioso, ya que nacido en Alemania, hijo de padre inglés y madre alemana, decidió jugar internacionalmente por Irlanda del Norte, algo a lo que le daba derecho su pasaporte británico y haber nacido en el extranjero. El primer club profesional en el que debutó en la football league fue uno de los más modestos conjuntos de la capital inglesa, el Barnet, por entonces (y ahora) en la cuarta división nacional. En dicho equipo, entre el 2004 y el 2008, fue director Deportivo Paul Fairclough, un antiguo exjugador del Liverpool trasladado a los despachos. Pero si Paul aparece en nuestro recorrido es por otro motivo, menos deportivo. Y es que es el cuñado de Kevin Rowland. ¿Qué quien es Kevin? Nada menos que el cantante y líder de los Dexys Midnight Runners, banda inglesa de principios de los 80, autores de la maravillosa Come on Eileen, una de esas canciones que me hace recuperar la fe en la humanidad.

Y aunque parezca que he dejado de lado el fútbol, nada más lejos de la realidad. En el 2004, la selección inglesa fue apoyada en la Eurocopa de Portugal al ritmo de la melodía de dicha canción, transformada ahora en "Come on England".

Lamentablemente para ellos, su participación acabó en la tanda de penaltis de los cuartos de final ante la anfitriona. No valió de nada el gol en los últimos minutos de la prorroga de Frank Lampard, que significaba el empate ingles.

Lampard...ahora jugador del Chelsea, pero criado, como antes lo fue su padre, en el vecino West ham United, poseedor de una de las mejores canteras del país.

Hasta principios de este verano, el equipo fue propiedad del que era uno de los hombres mas ricos de Islandia, Björgólfur Guðmundsson….y digo era, porque poco después de abandonar el club, se vio obligado a declararse en bancarrota, con unas deudas de casi 500 millones de libras esterlinas…

Supongo que su nieto no estará precisamente demasiado contento, viendo esfumarse una herencia de tal calibre, pero…al menos, puede aliviar sus penas metiendo goles. Y es que Björgólfur Hideaki Takefusa, mitad japonés mitad islandés, es el nexo de unión que nos lleva a cerrar el circulo. Jugador del KR Reykjavík (e internacional islandés), de donde llegó procedente del Fylkir, fue el autor del sexto de los goles de su equipo ante el desgraciado Stjarnan.

¿Quién sabe, cuantas mas conexiones están hay fuera, esperando que alguna vez lleguemos a desvelarla? Tal vez, en alguna otra ocasión…

4 comentarios:

cityground dijo...

Impresionante relato, me ha encantado.

¡Que grande Takefusa!, Islandia es un país que siempre me ha gustado, estilo Nueva Zelanda. Con los pocos habitantes que tienen en fútbol se defienden y en Balonmano son una potencia, subcampeones olímpicos con el Gran Olafur Setfansson.

Javi Magán dijo...

Hola. Me gustaría hacer un intercambio de enlaces con vosotros. Nuestro blog es este: http://diarigroguet.blogspot.com/

Un saludo y muy buen blog.

Anónimo dijo...

q buenooooooooo!!!!!!!!

Caracciolo dijo...

Martin, mimbres para hacer un artículo curioso de esos que tanto te gustan. El único equipo de la League Two que llegó a la 3 ronda de la League Cup y encima solo perdió en la prórroga, en las 2 primeras rondas, había eliminado a 2 equipos Championship, que curiosamente eran los 2 Sheffields. Ese equipo es el Port Vale.