En el último minuto del último partido

38 partidos.

3420 minutos.

100 millones de Euros de presupuesto.

26 millones de gastos en fichajes.

Y toda una temporada, medio futuro de una entidad centenaria, el entrar o no en la máxima competición continental, se decide pasado el tiempo reglamentario del último partido de liga, con el gol de un canterano que apenas había jugado en el primer equipo(mientras tu fichaje más caro esta ya en la caseta, expulsado por una nueva tontería, y van...).

Cosas como estas son lo que convierten en algo tan grande el fútbol. El que por mucho dinero que gastes, por mucha estrella que tengas, en cualquier momento, en cualquier lugar, un jugador anónimo pueda elevar la pierna, introducir un trozo de cuero entre tres palos, y romper todas las estadísticas, previsiones y apuestas, mientras el mundo se detiene por unos momentos, sin poder dar crédito a lo sucedido.

Y mientras esto pueda pasar, mientras no todo este regido por el monto de dinero del que dispongas, y nada pueda darse por seguro, aun confiaré en que el fútbol tiene futuro.

7 comentarios:

FI dijo...

Vaya forma de clasificar a Champions, con un canterano.

Sveret dijo...

Es el año de las canteras...

xtaoth dijo...

En fin......

Tengo que animarme a escribir algo desde el punto de vista mallorquinista, pero ahora mismo no tengo excesivas ganas ;). Por lo menos, fue en buena lid, y por poco que me guste la situación, en estos casos sólo se puede dar la enhorabuena al rival :P

PD: Lo estuvimos hablando durante el partido... Tengo la impresión (y no soy el único) de que Negredo acaba de tirar por la borda su convocatoria para el mundial.

Julípides dijo...

Como daba el título por perdido, y de los equipos que se jugaban el descenso, ninguno me inspiraba especial simpatía ni antipatía, para lo más importante como casi-sevillista fue lo del sábado noche.

Vaya alegría me llevé, pero a decir verdad, la imagen del final de liga fue el tremendo palo que se llevaron los mallorquinistas (pobres) con el botellón de cava ya en el cesped a su lado. Impresionante, me dieron mucha pena. Me recordó al año (80, creo) que al Madrid le pasó lo mismo en Zorrilla esperando el final del partido de la Real. De hecho, creo que fue el año de los cinco subcampeonatos.

Martín dijo...

Lo que resulta paradójico es ver como mientras el quinto, el Mallorca, transmitía unas sensaciones geniales a lo largo de la temporada, el Sevilla, que terminó por encima, hacia todo lo contrario. Supongo que eso en parte es bueno, significa que nos hemos hecho "grandes" (entendiendo por eso de algún cierto nivel,alejadisimo de el del Madrid y el barça claro).

Eso si, resulta chocante, por no decir otra cosa, que con tanto dinero gastado y tanta estrella, quien logré el gol decisivo sea un recién llegado. Es como si en un partido de la final de la NBA el tiro decisivo en lugar de jugarselo Jordan lo hace Tarin (a ver quien lo recuerda...)

cityground dijo...

¿Tarin no era un pivot español que era mas alto que Romay?, eso si era malo hasta decir basta.

Que viejos somos coño.

Martín dijo...

Ese mismo City. La cosa es que yo le vi "jugar"(si se puede llamar jugar a lo que el hacia en la pista) en el equipo de Cartagena cuando logró acceder de la tercera a la segunda division de la epoca, en una temporada gloriosa (donde gano todos sus partidos en casa conmigo en la grada,en un momento donde casi me iba mas el baloncesto que el futbol). Eso si, el aportar aportar, poquito...que malo era, pero malo, malo, malo.