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| El West Ham festeja un título largamente deseado |
La tercera competición europea en nivel de importancia se resolvió anoche en Praga con un título europeo para el West Ham United, el primero para los Hammers a nivel continental desde el pasado siglo, así como el primero también en lo que va de siglo XXI, rompiendo así con décadas de sequía en cuanto a metal se refiere.
Debo confesar que no tenía una preferencia clara para este encuentro. Ambos son clubes con mucha historia, muy bonita además, y bastante necesitados de éxitos. También los dos probaron los sinsabores de los descensos de categoría, si bien el cuadro italiano se llevó la peor parte ya que debió refundarse hace poco más de 20 años.
Ni si quiera vi el partido al completo. La primera parte me pareció un tanto anodina, por lo que seguí el segundo tiempo por una aplicación de resultados mientras veía una serie con mi esposa. Supongo que a estas alturas de temporada estoy tan saturado de fútbol que solo me quedan ganas para la final de Champions del sábado. Pero sería totalmente injusto desaprovechar estas líneas con mis tonterías y/o hablando de otro encuentro que todavía no llegó.
El West Ham merece que se le rinda un homenaje digno. Compite con clubes mucho más poderosos a nivel tanto económico como deportivo en la Premier League, e incluso en su propia ciudad con tres poderosos como Arsenal, Chelsea y Tottenham (si bien los Spurs siempre rondan los títulos no ganan uno desde 2008). Con todo, los entrañables Hammers han sabido hacerse un hueco con un equipo más que digno, que por fin da una gran alegría a su fidelísima hinchada.
Por su parte David Moyes merece reivindicarse. En su 6ª campaña al frente de los Hammers, y tras la semifinal de Europa League hace un año, por fin obtiene un título destacado. En su breve estadía con el Manchester United obtuvo una Community Shield, mientras con el Everton les dio estabilidad y cursos decentes en Inglaterra, pero poco más.
Respecto a la Fiore, vive otro sinsabor apenas un par de semanas de caer ante el Inter en la final de la Coppa Italia, por idéntico resultado. El año copero de los de Vincenzo Italiano ha sido excepcional, faltándoles tan solo culminarlo el día clave. Es cierto que el Inter probablemente era demasiado fuerte para ellos, pero ante el West Ham el duelo estaba mucho más equilibrado. Se quedan sin saborear las mieles del triunfo de nuevo, algo que no logran desde que en 2001 conquistasen la Copppa Italia ante el Parma, con el luso Nuno Gomes (¿os acordáis de él?) anotando el tanto decisivo. Ojalá pronto se les dé.
Por desgracia para el cuadro viola, no les veremos en Europa en la 23/24 ya que finalizaron en octava posición en la Serie A. Tampoco les sirve haber sido subcampeones de Coppa. Por su parte el West Ham disputará la Europa League, al obtener el pase como campeón de la Conference. ¡Enhorabuena Hammers!
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