El Milan se enquista en sus problemas

Pedro celebra el gol de la victoria laziale en el 90+8.

Cuando Sérgio Conceiçao sustituyó a Paulo Fonseca con el cambio de año, obteniendo réditos inmediatos al vencer la Supercoppa italiana con sendas remontadas ante Juventus e Inter, parecía que la campaña del AC Milan iba a despegar definitivamente. Ya no habría más peleas de Rafael Leão y Theo Hernández con Fonseca, se había logrado un título ante los máximos rivales y quedaban muchos meses de competición por delante para redimirse.

Dos meses después, el cuadro rossonero parece haber colapsado (de nuevo). Su curso ofrece tres grandes momentos entre una cantidad bastante superior de borrones. Vencieron el derbi liguero al Inter, se llevaron del Bernabéu un buen 1-3 ante el Real Madrid, y la mentada Supercoppa. Exceptuando esos cuatro encuentros, su curso es horroroso: a tan solo 11 jornadas para el final de la Serie A, se encuentran en novena posición, a 6 puntos de Europa y 9 de Champions, que pueden ser 11 si la Juve vence hoy al Hellas Verona. 

Sus últimos cuatro encuentros: empate ante el Feyenoord que les echa de la Copa de Europa; derrota en las visitas a Torino y Bologna (éste era encuentro aplazado), y anoche ante la Lazio, que les dio la puntilla con un penalti transformado por Pedro ampliamente superado el minuto 90. Desde aquella expulsión de Theo Hernández ante el Feyenoord, todo parece haberse venido abajo. Sin que antes fuera la octava maravilla, más o menos sacaban adelante sus compromisos. Ahora, fuera de la máxima competición continental de modo prematuro, y con los puestos europeos cada vez más complicados, quizá la última bala sea la Coppa Italia. En ella, se enfrentarán a doble partido al Inter en semifinales, el equipo más fuerte del país, pero que no ha podido batirles en ninguno de los tres choques que han disputado en lo que va de campaña.

¿Qué hay de los fichajes de invierno? El mexicano Santi Giménez ha dejado algunos goles, no ha estado mal. João Félix ha dejado jugadas más brillantes que efectivas. En cuanto a Kyle Walker, su nivel ha evidenciado porqué Guardiola no puso pegas a su marcha. Por otro lado, la baja forma del vestuario milanista se refleja en figuras como Mike Maignan. El guardameta francés, esencial para el Scudetto que conquistaron en 2022, lleva tiempo sin ofrecer su mejor versión. Suyo fue un error que propició el penalti de Pedro en el último lance del partido de anoche ante la Lazio, un rival directo que se llevó un triunfo de oro de San Siro, dejando al Milan sumido en frustración y un mar de dudas.

Quizá lo mejor para los de Conceiçao es su calendario a corto plazo. Visita a Lecce (16º) antes de recibir al Como (13º), previo parón de selecciones, tras el cual jugarán ante Napoli, Inter (Coppa Italia) y Fiorentina, un tramo duro al que veremos como llega este Milan que no acaba de despegar, y al que el tiempo se le va acabando.