La encrucijada de Alexandre Pato

En plena ebullición del mercado de fichajes invernal, estos días algunos de los clubes europeos con dinero fresco suenan como principales agitadores a la hora de reforzarse. Si bien el Anzhi ruso le tira a todo lo que se mueve (aunque por ahora solo ha fichado a Krasnozhan como nuevo técnico), es el la Europa occidental donde se juega una partida de ajedrez que anda enquistada varias semanas con tres clubes en pos de un jugador en un enredo que se ha complicado las últimas horas con la aparición de otra estrella del panorama.

Hablamos de Manchester City, AC Milan y PSG, con Tévez en el ojo del huracán, en un entuerto en el que se hace lugar el brasileño Pato. Sin embargo, no aburriremos más a nadie con el veleta argentino, sino que echaremos un vistazo al tema de Pato.

Situación: el PSG fue adquirido el pasado verano por el jeque qatarí Nasser Al-Khelaïfi (primo del dueño del Málaga CF), inyectando una fuerte cantidad económica para reforzar el equipo con futbolistas como Kevin Gameiro, Javier Pastore o Diego Lugano. Antoine Kombouaré, ex jugador de la entidad parisina en los años 90 que cumplía su tercera temporada al mando del equipo, es destituido la semana pasada ante la poca consistencia del equipo, que acaba de recuperar el liderato en la Ligue 1 pero cayó eliminado en la Europa League, quedándose fuera de las competiciones europeas hasta la próxima temporada.

En estas que comienzan a sonar nombres, cobrando consistencia el rumor que situaría al transalpino Carlo Ancelotti en la capital francesa. ¿Y cuál es su prioridad? Alexandre Pato. Nada de Apache. Tévez ya ha dejado claro que no quiere ir a París sino a Milán, aunque los lombardos lo quieren cedidos y el City prefiere traspaso o nada. De un plumazo, la opción Tévez en el PSG desaparece.

Así pues, con las cartas sobre la mesa y una amplia nómina de delanteros en el cuadro rossonero (a la que Maxi López podría sumarse pronto), Pato lo tiene tan claro que ya le lanza dardos envenenados a su propio técnico. El montante del traspaso del punta brasileño al PSG podría rondar los 50 millones de €, suficientes para que el Milan adquiriese a Tévez en propiedad.

Sería seguramente un cambio de aires necesario para el paranaense, cuyas continuas lesiones musculares le han privado de más presencias en la selección brasileña (se perdió la Copa América) así como de jugar más con la casaca rossonera. Recordemos que aterrizó en San Siro en enero de 2008, jugando entre lo que quedaba de campaña y la siguiente 54 partidos en Serie A, anotando 24 goles en total. En las dos siguientes temporadas más lo que va de esta ha disputado 56 con 27 dianas, unos números que deberían ser mejores conocido su talento y juventud pero que no engordan por los desencuentros con Allegri (suele alinear a Ibrahimovic y Robinho) y esos contratiempos físicos que tan pesado lastre le suponen.

En los próximos días saldremos de dudas y sabremos si acompaña a Ancelotti en la aventura de este PSG que sueña con repetir glorias pasadas o si se queda en Milanello peleando por un puesto de titular que no acaba asegurarse pese a ser uno de los favoritos de la afición rossonera.