Una despedida cafetera
Todo tiene un final, y hasta para algo tan largo como un año, el tiempo tiene preparado un adecuado sepulcro . Para cada uno de nosotros, 2009 habrá significado algo distinto . En unos casos se trató de un simple cambio de almanaque, un número más que añadir a la pesada carga de la edad, un tranquilo paseo por el desierto, sin oasis en el camino, pero tampoco alimañas ni bandidos. Para otros fue en cambio un periodo de inesperadas (o esperadas) transformaciones, de nuevos retos planteados o viejos desafíos vencidos. Para lo malo o lo bueno, el año no habrá pasado en balde. No se puede hablar del tiempo sin caer en la añoranza…algo que no tiene porque ser negativo (mientras solo pienses en el, y no pretendas vivir en el) el recuerdo es bello, si bello es el recuerdo . Para los futboleros, diversas imágenes habrán marcado el año, algunas de ellas fácilmente olvidables, otras destinada a perdurar en la memoria colectiva. Todos tendremos una particular galería, coincidente con la de la may...