Siete estados, siete clásicos

Jornada de duelos importantes en el maratónico y exótico mundo de los Campeonatos Estaduais. A casi un mes de iniciada la actividad oficial de este año, varios de los equipos importantes de Brasil se enfrentaron en partidos clásicos este domingo. Encuentros apasionantes, certámenes que empiezan a tomar forma y grandes curiosidades. Todo eso y más en un fútbol rico, pero desconocido para muchos e ignorado por otros.

La aplanadora verde
Sin intenciones de ubicar a quien escribe estas líneas como una especie de talismán, es necesario repetir que el Palmeiras se encuentra en una racha fenomenal desde que arrancó el 2009. Después de seis victorias consecutivas —dos de ellas por la Copa—, el Verdão recibía al Santos en el Palestra Italia. No pudo hacer demasiado el Peixe para detener al local, que lo vapuleó por 4-1, con gol de chilena de Edmilson incluído aunque parezca increíble.

Con este resultado y manteniendo el puntaje ideal, los de Luxemburgo mandan en la tabla del Paulistão, aventajando por una unidad a Corinthians y dos a São Paulo con un dato importante: aún tienen un partido pendiente ante Noroeste, colista de la competición.

La fiesta deberá esperar
En Pernambuco, todo parecía servido para el club más importante de la región: el Sport de Recife, que con una victoria en el Clássico das Multidões ante el Santa Cruz se aseguraba terminar en la cima de las posiciones la primera fase del estadual, denominada en esta ocasión “Taça Revolução Constitucionalista de 1817”.

A menos de diez minutos para el cierre, el ingresado Ciro ponía en ventaja al Leão, cuyo público ya empezaba a saborear un triunfo en casa ajena y el pasaje seguro a la final absoluta, a disputarse luego de la segunda rueda. Pese a las ilusiones visitantes, apareció Adilson para postergar al menos unos días la definición. Con un margen de cinco puntos sobre su último rival y dos jornadas por jugar, el Sport podrá aferrarse al primer lugar este martes, cuando visite al Central en la ciudad de Caruaru.


El Flu, de capa caída
Después de un olvidable paso por el Hamburgo, el retorno de Thiago Neves al Fluminense no fue el esperado, porque el Clássico dos Gigantes ante el Vasco terminó sin goles y su equipo quedó bastante lejos de los puestos de privilegio.

Recordemos brevemente el complejo sistema del Campeonato Carioca. Los 16 equipos se dividen en dos grupos de ocho. Durante la primera fase, se enfrentan a los siete rivales de su mismo grupo, mientras que en la segunda lo hacen ante los ocho de la otra zona.
Al término de cada fase, los dos primeros de cada grupo van a semifinales para determinar al campeón de la Taça Guanabara y la Taça Río. En caso de que un mismo conjunto gane ambos mini torneos, se proclama campeón carioca. Caso contrario, los dos vencedores juegan entre sí la final del año.

Con este complicado panorama, el único clasificado a semis es el Flamengo, que ganó sus cinco encuentros en el Grupo B y es escoltado por Botafogo, que suma 12 puntos y está muy cerca de asegurarse su lugar.
En el Grupo A todo es parejo. Lidera Vasco da Gama con 10, pero lo siguen de cerca Americano con 9, Cabofriense y Duque de Caxias con 7.


Inter festeja en Porto Alegre
Con un sistema tan difícil y raro como el de su par Carioca, el Campeonato Gaúcho enfrentaba en su sexta jornada a Internacional, cómodo líder del Grupo A, y Grêmio, de andar más bien trabajoso en el Grupo B. Acorde a lo que venían demostrando en los partidos anteriores, el equipo rojo ganó por 2-1 y se aseguró su lugar en cuartos de final. Hasta el momento, los campeones de la Sudamericana registran cinco triunfos y un empate. Novo Hamburgo, con 10, Juventude y Esportivo, con 8, pelean por el segundo puesto.

Por su parte, Grêmio marcha apenas sexto en su zona, pero tiene un partido menos que varios de sus rivales y el hecho de que clasifiquen cuatro por grupo le da un poco de oxígeno.


Histórico resultado en Goiás
Explicar el sistema de este torneo podría resultar hasta peligroso para salud, por lo que vamos directo a la acción (para los valientes, está al final del artículo). Se enfrentaban los dos conjuntos más populares del estado, aquellos que se dividían la formación y el amor de nuestro amigo Túlio, es decir, el Goiás y el Vila Nova. Los primeros marchaban en buena forma en el Grupo B, mientras que su rival venía resbalando en la otra zona.

El escenario era inmejorable, ya que las 60.000 localidades del estadio Serra Dourada estaban colmadas mayoritariamente por simpatizantes del Vila Nova, dueño de casa. A sólo seis minutos de iniciado el partido, el local marcó su primer tanto, que hacía pensar en una tarde de recuperación. Pese a ese arranque promisorio, todo se fue desmoronando para el Tigrão y el Goiás se hizo una fiesta nunca vista, que terminó con la mayor diferencia histórica. En una notable exhibición de fútbol, goles y lujos, el Esmeraldino selló un espectacular 6-1 sobre su rival de toda la vida, un resultado que seguramente será difícil de olvidar para los hinchas verdes.


Bahia cambia de dueño
Más hacia el norte, el Campeonato Bahiano tuvo un cambio de mando. El bicampeón Vitória recibía en la séptima fecha a su eterno rival, el Bahia, al que aventajaba por dos unidades. En un encuentro accidentado en las tribunas —el saldo final fue de 32 heridos—, los visitantes se impusieron por 2-0 y le arrebataron el primer puesto al conjunto rojo y negro. Ahora el Tricolor es líder con 16 puntos y un partido pendiente ante el Madre de Deus.

En este certamen, los 12 participantes juegan ida y vuelta en 22 jornadas, después de las cuales los cuatro mejores clasifican a semifinales. ¿Sencillo? En comparación a la mayoría de los estaduais podría decirse que es hasta extraño.


El gran clásico del norte
Pese a no ser dos equipos especialmente populares a nivel nacional, Paysandú y Remo pueden sentirse orgullosos de protagonizar el clásico que más ediciones ha tenido a lo largo de la historia del fútbol brasileño. Habría que bucear en las estadísticas de otros países, pero los 694 choques entre estos dos equipos son un número difícil de superar en cualquier punto del mundo.

Con semejantes cifras, uno podría asegurar que llevan más de un siglo enfrentándose, pero estaría equivocado. El puntapié inicial de esta verdadera maratón de clásicos fue el 10 de junio de 1914. Haciendo matemática ligera, es asombroso ver que tienen un promedio de casi ocho enfrentamientos anuales, toda una tradición.

Estadísticas al margen, el partido terminó empatado en dos tantos. Con este resultado, Paysandú sigue primero, con tres unidades de ventaja sobre su rival, que marcha en la tercera colocación y sigue feliz por mantener una racha de 11 clásicos invicto. Para agregar más emoción, el reciente bicampeonato de Remo dejó la cuenta igualada en 42 títulos por bando.


Off Topic - Explicación del sistema Goiano
Para los que se animen, acá está una explicación que hubiera sido redundante y aburrida en medio del artículo:
Los 12 participantes se dividen en dos grupos y se disputan tres ruedas. A lo largo de las dos primeras, los seis integrantes de un grupo se enfrentan —en partidos de ida y vuelta— a los seis del otro grupo. Después de eso se juega la tercera rueda, en la que cada conjunto disputa cinco encuentros frente a los rivales de su propio grupo.
Una vez disputados estos 17 partidos, el primero de cada grupo choca en semifinales contra el segundo del otro. Luego los ganadores de cada serie definen el título. Lo que se dice un verdadero rompecabezas.

De regalo, los goles del enorme triunfo de Goiás:



///