10ª jornada Premier League: grandioso North London derby

“Esta vez ya era demasiado”. Algo así debieron pensar nuestros Tigers cuando llegaron al vestuario tras finalizar el choque que los enfrentó al Chelsea de Scolari, que los goleó 0-3 (con un gol de Lampard a los dos minutos de juego) dominando el encuentro en todo momento y aumentando la diferencia hasta hacerla insalvable en la segunda mitad. No por ello vamos a dejar de sentir orgullo por el Hull City, al que aún le quedan muchas proezas por alcanzar. Ahora son 5º, igualados a puntos (20) con Aston Villa y Arsenal pero con peor diferencia de goles que estos.

A la cabeza sigue encaramado el Liverpool (26 puntos, tres más que el Chelsea), que solventó por la mínima su duelo contra el Portsmouth en el estreno de Tony Adams en el banquillo de los sureños. No vencieron los reds con brillantez, pero si a base de un constante acoso sobre el Pompey (14) que terminó dando sus frutos gracias a un incomprensible penalti cometido por Papa Bouba Diop y transformado por el magnífico Steven Gerrard.

Por su parte, el Manchester United (18, un partido menos) vencía sin demasiados problemas por 2-0 al West Ham (12) de Zola, con sendos goles de C.Ronaldo, el segundo de ellos tras un regate maravilloso de Berbatov en la línea de fondo que levantó los “oooooh” de admiración en el mítico graderío del Teatro de los Sueños.

Y llegamos al partido más bonito, de mayor carga emotiva y que sirve de paradigma por su desarrollo y resultado final para condensar en 90 minutos esa bella locura que significa el fútbol inglés: juego frenético, ataques constantes, esfuerzo generoso, emoción a raudales, pasión tanto en la grada como sobre el tapete, y por supuesto, muchos goles. Hablamos, como no, del North London derby, el clásico partido grande de la capital inglesa (y que me perdonen los hinchas del resto de históricos londinenses) que nos regaló cambios de guión por doquier e intensidad hasta el último suspiro. Un 4-4 que no puede dejar indiferente a nadie, donde el verdadero vencedor fue el aficionado neutral, y si cabe diferenciar entre ambas hinchadas, probablemente por el desarrollo del partido así como las circunstancias, los Spurs puedan tomarse este empate como un pequeño triunfo. ¿Qué mejor que ver el resumen para entender todo lo que digo?

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El Tottenham sigue siendo colista, aunque ha sumado 4 de sus 6 puntos desde el domingo hasta el día de ayer, por lo que con el potencial de su plantilla unido al momento anímico de la misma no cabría descartar que fuesen capaces de meter mano al por ahora imbatido Liverpool, líder de la competición que los visitará este sábado en el que paradójicamente será con seguridad uno de los duelos más “igualados” entre un puntero y un colista de la era más reciente en cualquier competición a estas alturas de la misma.

Poco a poco y sin armar demasiado ruido se ha colado entre los grandes el Aston Villa, que derrotó 3-2 al Blackburn Rovers (12) en un lúcido choque en el que tuvo que remontar al principio y sufrir al final. A día de hoy, representan la única alternativa seria al poder de los 4 titanes.

De entre el resto de choques destacan las victorias de Newcastle (17) y Stoke (15) sobre WBA y Sunderland respectivamente, que les permiten tomar un poco de aire, dejando atrás (aunque no demasiado) los puestos de descenso. También el Everton (12) sumó 3 puntos balsámicos (una vez más, Fellaini, en el descuento) que lo sitúan en la igualada zona media tras deshacerse a domicilio de un Bolton (19) cada vez más hundido.

Otra derrota del irregular Manchester City (8) en Middlesbrough (9) por 2-0 sitúa a los citizens a 7 puntos de la zona Champions. Por último, un doblete de Eddie Johnson aleja al Fulham (14) de la zona caliente, en la que queda inmiscuido de lleno su rival, un Wigan Athletic (18) en franca decadencia a tenor de sus últimos resultados.

Para la 11ª fecha aparece como choque estrella el que disputarán el sábado en White Hart Lane el emergente Tottenham frente al sólido Liverpool. “Nuestro” Hull visitará al Manchester United con intención de dar otro bombazo, mientras para el lunes queda un siempre atractivo Newcastle – Aston Villa.