Algunas impresiones de lo que va de Mundial (bordeando el ecuador)

A punto de alcanzar el ecuador de la competición, algo que haremos en cuanto concluya el Honduras-España que se disputará mañana, lanzamos algunas reflexiones sobre lo que llevamos visto hasta el momento, las selecciones que están colmando las expectativas y aquellas que por el momento decepcionan, así como los protagonistas ya sean estos técnicos, jugadores o incluso periodistas y en definitiva todos aquellos momentos que creemos merecen la pena ser comentados:

• Empezamos con unos favoritos donde la irregularidad está siendo el principal denominador común en muchos de los grandes bloques si bien no siempre nos referiremos al resultado final del encuentro, pues el juego desplegado por ahora tampoco pasará a la posteridad por la belleza del mismo. En este aspecto España dio el primer gran batacazo ante un rival eminentemente inferior, siguiendo su estela Alemania ante Serbia (aunque éstos tienen bastante más talento que los helvéticos). Francia es el desastre que algunos intuíamos aunque aún goza de una opción clasificatoria pero no depende de si misma. Argentina gana sin demasiado fútbol pero creando muchas ocasiones y aprovechando el gran momento de algunos de sus puntales. Holanda también vence pero está lejos de enamorar como hacía antaño. Brasil e Italia van a lo suyo, no engañan a nadie ni lo pretenden, siendo una lástima que cada día la Canarinha se parezca más a la Azzurra y no al contrario, aunque si por algo destacan es por su gran competitividad.

• Los Three Lions son caso aparte. Han empatado dos encuentros que se presumían como obligada victoria para todo aquel bloque que se considere serio candidato, etiqueta que muchos están traicionando por el momento. No solo eso, su clasificación está en duda aunque si vencen a Eslovenia estarán en octavos, otra cosa es la parte del cuadro que ocupen. Ahora parece que todos dudan de Capello olvidando que vendieron su alma al diablo en el momento en que lo contrataron, jugando a algo que quizá no sepan los ingleses para dejar de lado un estilo centenario. El transalpino es transparente en discurso e ideas, pero admite que los suyos están desconocidos. Como no se encuentren a sí mismos pronto, habrá hecatombe, aunque uno desconfía tanto de un equipo dirigido por Fabio como de la mismísima selección italiana, maestros en el arte de una supervivencia que muchas veces es la que te lleva a la gloria.

• Por su parte los transalpinos han dado hoy una imagen bastante patética ante Nueva Zelanda, incapaces de crear algo parecido a fútbol cuando tienen que llevar la iniciativa, y eso que hablamos del vigente campeón contra el plantel más débil con diferencia. Su saldo tras dos envites es de dos puntos con dos goles a favor y otros tantos en contra, merced a uno entre De Rossi y un defensor paraguayo y un penalti contra los kiwis. O sea, lo de siempre pero con una diferencia palpable: en esta ocasión no se han llevado nadie que marque las diferencias. No hay un Del Piero ni un Rivera o un Baggio. Apenas el lesionado Pirlo pone algo de claridad, mientras Cassano contrae matrimonio mientras Miccoli y Totti lo ven por la tele.

• Sabemos que si bien el juego atractivo y la cantidad de goles no tienen porqué estar directamente interrelacionados si que es cierto que cuanto mejor sea la propuesta ofensiva supuestamente veremos más ocasiones y es más probable que ello aumente el saldo anotador. Nada más lejos de la realidad, ya que ni estamos viendo fútbol ni apenas goles, con los únicos destellos por ahora de germanos y argentinos, más consistentes los primeros ante Australia pero más fiables los segundos al haber corroborado su victoria inicial con otra ante la siempre incómoda Korea del Sur. De lo más rescatable el Dinamarca-Camerún disputado ayer noche.

• México o Uruguay apuntan a sorpresas. Los aztecas parecen dispuestos a demostrar en esta ocasión el potencial que perennemente se dice que poseen pero luego no traducen en resultados. Carlos Vela y Gio Dos Santos son los mejores representantes del mágico cuadro que se proclamó campeón mundial sub17 tras avasallar a Brasil en una final muy recordada en el país centroamericano, principal aval para soñar en dar ese paso adelante que los integre entre los grandes. Los charrúas por su parte quieren reverdecer viejos pero brillantes laureles y tienen ante sí una ocasión única para volver a hacer algo importante en un Mundial. Fuertes y expeditivos atrás, talentosos arriba, ¿por qué no esta vez? Ambos quieren ser primeros de su grupo para evitar el previsible cruce ante la poderosa Argentina, habitual bestia negra para ambos. Entre ellos incluiría sin dudarlo a Serbia y Chile, dos de mis apuestas personales para el torneo, las cuales espero que también logren el boleto a octavos.

• Si bien los de arriba son las sorpresas agradables, pondría en otro apartado las revelaciones inesperadas. ¿O alguno otorgábamos opciones a Eslovenia en un grupo con Inglaterra y USA? Muy meritorio lo de los eslavos, que contrarrestan el talento del que adolecen con orden e ilusión, habiendo llegado a la 3ª jornada con opciones reales de acceder a la siguiente fase. Tampoco hemos de olvidarnos de Nueva Zelanda, que jamás había puntuado en una fase final hasta ahora y lleva dos puntos en otros tantos partidos, con la posibilidad incluso de clasificarse a los octavos si es capaz de vencer a Paraguay y les favorece el resultado del Italia-Eslovaquia.

• En el polo opuesto se encuentra una Nigeria muy lejos de sus mejores días, anárquica y desordenada como históricamente ha sido pero carente de aquellos futbolistas distintos que aportaban el plus necesario para dar el salto de calidad. Ya no hay un Okocha para llevar el mando, un Oliseh que cierre con categoría en el medio o un Kanu (está convocado, pero es muy veterano) que aporte la magia necesaria para romper los partidos. En cuanto a Camerún, muchas dudas asaltan su rendimiento en estos dos encuentros en los que se ha convertido en la primera eliminada de la Copa tras una mala actuación ante Japón y un partidazo que se marcaron ante los daneses, donde el desacierto arriba los condenó quizá demasiado pronto.

• Para #LosParabolicos los que nos gusta disfrutar de futbolistas un poco más desconocidos para el gran público, apariciones como las del japonés norcoreano Jong Tae-Se, el mexicano Chicharito Hernández, el japonés Matsui, el eslovaco Vladimir Weiss o el ghanés Asamoah Gyan (a él ya lo vimos en Alemania’06) son sensacionales, ya que aparte del aire fresco que aporta su forma de entender el fútbol suponen también un incentivo para quedarte frente al televisor viendo aquellos combinados nacionales menos “populares”. En este sentido del espectáculo, suspende la FIFA por no permitir a los neozelandeses danzar la haka, toda una ofensa a una tradición preciosa con la que los oceánicos se han hecho famosos a lo largo y ancho del globo siempre que una de sus selecciones nacionales va a disputar un encuentro internacional.

• El periodista de Telecinco JJ Santos, pese a que el del bar de al lado el bar de al lado podría querer matarme, es un personaje tan prescindible en la órbita informativa como desesperante en su papel de informador. Admito que cuando hace una década hizo su aparición le seguí pues me gustaba su estilo, pero o él ha degenerado mucho o yo he crecido lo suficiente, aunque mis colegas tienden a decirme que ambas cosas. No es ya solo su inefable narrativa ni sus constantes patinazos, es que también desinforma y su personaje contrasta atrozmente con el de Paco González (son puro ying – yang). Por favor JJ, si te pasas por nuestro humilde Café, déjanos disfrutar de lo que resta de Mundial sin torturarnos demasiado.

Finalmente quisiera constatar que no se comenta nada sobre el Brasil-Costa de Marfil pues se disputa tras la edición de esta entrada, por lo que probablemente luego o ya mañana haremos mención al mismo así como al resto de choques pendientes.