Contrataciones mayores
Desde el adjetivo del título, bien podría hacerse referencia a enormes sumas de dinero, patrimonio exclusivo del más puro fútbol empresarial. Pero no es este el caso. Aquí la grandeza no tiene que ver con las cifras, sino con las numerosas hojas en el currículum de los protagonistas, jugadores de vasta experiencia y extensas trayectorias.Con los principales estaduais comenzando casi al unísono este fin de semana, muchos interrogantes se irán develando en torno a las flamantes incorporaciones de los principales equipos, muchos de los cuales vuelven del retiro.
Roberto Carlos - Corinthians
Ya con Ronaldo en su plantel desde hace casi un año, el Timão sumó a otro de los emblemáticos jugadores que en poco menos de dos décadas pusieron a la selección de Brasil en la cima del mundo. Luego de un buen paso por el Fenerbahçe y a punto de sumar 37 abriles en el mes homónimo, este ícono de la banda izquierda llega para que el centenario del club sea lo más glorioso posible.
Con tantas contrataciones rutilantes, la evaluación será bien clara: Cualquier desempeño que no incluya al menos la Libertadores o el Brasileirão será tomado como fracaso por los exigentes torcedores.
Giovanni – SantosPasaron ocho meses desde su retiro vistiendo la camiseta del Mogi Mirim, pero no quiso perder la chance de despedirse del club que lo hizo ídolo. Con casi 38 años, el ex Barça superó con éxito los tests físicos y firmó hasta el fin del Paulista, momento en que espera decir adiós con un nuevo título. Será el responsable de apuntalar la nueva generación de jóvenes talentos.
Dodô – Vasco
Tras una suspensión por doping que lo alejó de los campos en agosto de 2008, el otrora ídolo del Botafogo se calza la camiseta de uno de sus rivales cariocas. Es una incógnita ver cómo responderá —a los 35 años y arrastrando una inactividad tan prolongada— un delantero cuya capacidad nunca fue de la mano con la regularidad ni la buena conducta.
Edílson – BahíaSe había retirado del fútbol en 2007, defendiendo los colores del Vitória, y hoy vuelve a calzarse los botines en la vereda opuesta. El tricolor lleva fuera de la elite seis fatídicas temporadas, que incluyeron un superado paso por la Serie C y recientes coqueteos con el descenso en la B. Sus torcedores no tomaron de muy buena manera la incorporación del pentacampeón mundial, quien tiene 39 años y apenas recibió comentarios cargados de desconfianza.
Sávio – Avaí
Tan talentoso como frágil, abandonó la Península Ibérica en 2007 y ahí fue cuando se le perdió el rastro. Tuvo un paso por la Desportiva Capixaba, de su Espírito Santo natal, pero rápidamente voló a Chipre, donde se transformó en símbolo del Anorthosis. Sus números más importantes marcan 36 años, 785 partidos y supuestos 397 goles a lo largo de su carrera.
¿Podrá hacer olvidar al deteriorado jugador que pareció ser en su vuelta al Fla durante 2006?
Juninho Paulista – ItuanoVestirá la camiseta del club que lo vio nacer, del cual asumió una especie de presidencia a mediados del año pasado. Sus comienzos prometedores en São Paulo, aquellos años europeos entre Middlesbrough y Atlético Madrid, su consagración en Corea-Japón gracias a su decisión de volver a jugar en Brasil: Todo forma parte de la historia de quien supo terminar su carrera hace dos años, en la ignota liga australiana.
El objetivo será que los de Itu vuelvan a disputar, esta vez con más éxito, la Serie D.
Viola – Brusque
Junto a Ronaldo, es el único campeón del 1994 en actividad. A partir de ese logro, se convirtió en un auténtico trotamundos improductivo. Va por su 17ª camiseta profesional, habiendo cosechado escasos éxitos en casi todos los clubes que conoció. Con 41 calendarios y paupérrimos registros recientes —seis temporadas sin marcar más de diez tantos— vestirá los colores de este humilde club catarinense, cuyo objetivo es tener revancha en la Serie D.
Teniendo en cuenta el nivel lógico que cada uno puede demostrar —por antecedentes y actualidad reciente— ¿A cuál de estos mayores ven como la mejor incorporación para su equipo? ¿Quién pasará con más pena que gloria?
Comentarios
A mi esos de la vuelta de futbolistas retirados me suena raro, cuanto menos, y mas si no se trata de un retiro de unos meses, sino de años...no se, lo peor es que en algunos casos puedan ensuciar su recuerdo.
A ver que hace roberto carlos (y el corinthians en su conjunto), y ojala le vaya bien a Savio, que siempre me gusto(le falto un punto no se si de sangre para llegar a ser mucho mas).
Hablando de Savio, hubo una época (oscura) de mi vida en que me dejaba arrastrar por los amigos a antros superpijos de Madrid, de los que frecuentaban jugadores del Madrid (aunque a mi el sitio al que más íbamos me parecía supercutre). Vi, de madrugada casi siempre, a muchos jugadores del Madrid: Salgado, Morientes... sin parecer ni ir de de "seres superiores" sí que se comportaban algo como VIPs (en el sentido de inaccesibles, salvo que pasaras a su lado).
Sin embargo, una vez me encontré a Savio, con la que decían que era su novia, y me puse a charlar con él un par de minutos. Era (y su chica) un tipo sencillo, como cualquiera de sale de noche a tomarse una Coca Cola (y doy fe que era Coca Cola). Fue más bien tímido, pero agradable, y agradecido de que simplemente le saludamos y comentamos que nos caía muy bien y que nos gustaba como jugador. Tampoco le dimos la brasa ni le pedimos autógrafos ni nada. Sin embargo, un día tuve un "encontronzo" con Tote (ahora en el Hércules), es decir, un completo mindundi, que se comportó como un auténtico gilipollas creído. En resumen, que paso de enrrollarme, pero acabé por darñe un pisotón fuerte en el pie. Disimulé bien, y se creyó que fue sin querer, pero no, ni de coña, se lo mereció.
Me gustaba mucho Savio, claro caso de jugador al que la gente no le ubicó el tipo de jugador que era, y que casi nunca jugó en su posición, porque ni era interior ni extremo, como pensaba casi todo el mundo.
Gran historia la que cuentas de tu encuentro con Sávio. Aún por relatos de otros, enterarse de que ciertos jugadores son tipos sencillos y humildes nos hace tomarles más aprecio.
A mi entender, siempre tuvo muchas condiciones, pero las lesiones lo perjudicaron mucho. Como dice Martín, quizás le haya faltado una pizca de algo para ser super crack.
Por cierto, me gustaba muchísimo más que varias de las modernas estrellitas brasileras —Léase: Robinho o Diego—.
De los siete jugadores que se nombran en el artículo, cuatro vuelven del retiro
Roberto Carlos y Sávio vienen de una actividad en ligas menores. Viola no ha interrumpido su carrera, aunque su rendimiento viene siendo espantoso.
Quizás lo de Giovanni es lo más lógico puesto a que sólo se retiró hace unos meses.
Juninho jugará en un equipo chico y un torneo menor, por lo que quizás no se sienta tanto esa inactividad.
Pero lo de Edilson y Dodô es de temer. Por lo duras que son ambas hinchadas, creo que los pueden llegar a incinerar ante el más mínimo desliz.
http://www.somosche.com/media/galeria/56/3/5/6/5/o_valencia_historicos-55653.jpg
http://www.elenganche.es/2008/07/adios-al-%E2%80%98dog-man.html
El retorno de varios veteranos no siempre es un síntoma de que falten estrellas.
Por citar un ejemplo, hoy el fútbol argentino se compone de sólo dos generaciones: los jóvenes de menos de 21 años que buscan pasar a Europa, y los jugadores de experiencia que superan los 32.
Hoy tanto Brasil como Argentina se encuentran acéfalos de la generación más fuerte: aquellos jugadores de entre 24 y 30 que mezclan plenitud física con experiencia.
Esta escasez es mucho mayor en Argentina, donde no hay equipos cuyas figuras tengan esas edades intermedias.
En Brasil también se nota la sequía, pero la evolución de la liga local es muy fuerte. Hoy el Brasileirão es sin dudas el mejor torneo de América, años luz por delante del campeonato Argentino.
Por organización, calidad y presupuesto, está muy por encima del resto.
En otros tiempos hubiera sido impensado ver a jugadores con la fama de Adriano, Roberto Carlos, Ronaldo, Vagner Love, Edmilson y compaía en un torneo local.
Hoy no es descabellado. Si bien todos se alejaron de Europa por algo —ya sea veteranía o bajos rendimientos—, todos tienen una trayectoria.
A mi entender, la vuelta de los veteranos a sus tierras simboliza dos cosas
1º La imposibilidad de hacer frente al poder del Euro y contar con estrellas de 27 o 28 años.
2º Un creciente nivel en el torneo doméstico, provocador de que no sea descabellado vestir la camiseta de la selección desempeñándose en el medio local.
Los mejores siempre van a estar en Europa, pero eso no quiere decir que los que estén dentro del país vayan a quedar marginados, como sí ocurre en Argentina o en otras épocas de Brasil.
Saludos
entradas madrid atleti